No creo en quien ofrece disculpas. Esas personas que cometen un agravio, acto seguido se disculpan y no corrigen esa conducta nociva por la cual se disculpan, tan solo esperan que el agraviado acepte sus argumentos para que éste dé el asunto por concluido (es decir, que asuma que no se volverá a repetir) y deje así la puerta abierta para ejercer posteriores agravios de los cuales se disculpará cómoda y "honestamente". Justificarse ("no lo hago a propósito", "intento cambiar") es mera estrategia para asegurarse una cercanía a quienes pueda dañar.
Yo no tolero esa conducta rastrera. La única acción efectiva es limitar el contacto con este tipo de gente en medida de lo posible y no darle pié a su miserable proceder. Esa gente pide, muy convenientemente, que le "comprendamos (a veces incluso recurriendo a las lágrimas)" tan solo para continuar su ciclo de mezquindad disimulada. Promete esforzarse en cambiar pero es mentira: el hecho es que no piensa cambiar jamás. ¿Por qué trataría de abolir la conducta que le proporciona la mayor satisfacción de su vida?
De esos seres no puede esperarse nada constructivo. La vida es muy corta y valiosa como para acumular insultos de quien obtiene placer en proferirlos.
Yo no tolero esa conducta rastrera. La única acción efectiva es limitar el contacto con este tipo de gente en medida de lo posible y no darle pié a su miserable proceder. Esa gente pide, muy convenientemente, que le "comprendamos (a veces incluso recurriendo a las lágrimas)" tan solo para continuar su ciclo de mezquindad disimulada. Promete esforzarse en cambiar pero es mentira: el hecho es que no piensa cambiar jamás. ¿Por qué trataría de abolir la conducta que le proporciona la mayor satisfacción de su vida?
De esos seres no puede esperarse nada constructivo. La vida es muy corta y valiosa como para acumular insultos de quien obtiene placer en proferirlos.
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