viernes, 27 de abril de 2012

Casi una metanoia.

Hace unas horas (como a eso de las 10:50 AM) me alisté para salir y comprarle comida a mi gatita. Siempre me pongo un tanto nervioso antes de salir. Me preocupa toparme con algún vecino y me importune con algún gasto o cooperación para beneficio de la unidad. O que simplemente quiera hacerme plática y saber cómo me ha ido, qué he hecho, etc. En cualquier caso siempre me preocupa eso y mi (desde mi punto de vista) mal aspecto. Antes de salir me tomé un par de fotos para darme una idea de cómo soy visto por otros y yo creo que la cámara de mi celular es buena porque no me veía tan mal. Eso me infundió ánimos para salir.

Sin embargo, al regresar e intentar abrir el zaguán, no pude hacerlo. Ahí afuera estaban los distribuidores de agua esperando que alguien entrara o saliera para poder acceder en la unidad. Fue algo muy chusco porque estuve alrededor de cinco minutos tratando de abrir. Uno de ellos me observaba impaciente y yo tímidamente le dije, "no vayas a creer que estoy borracho, simplemente no puedo abrir". Rió sutilmente pero seguro que en fondo pensó que yo era un idiota incapaz de abrir un simple zaguán. Finalmente, el que recoge la basura, abrió desde dentro.

Lo interesante es que esta cagada (acción torpe o equivocada) antes me hubiera acomplejado bastante y hundido en una breve depresión. Le habría dado mil vueltas al incidente, lamentando haber quedado como idiota frente a un par de extraños. Ahora fue completamente distinto. Sí me sentí un poco apenado al no poder abrir pero no pasó de eso. Y al entrar a casa y cerrar la puerta tras de mi, dicho incidente se quedó afuera. No hizo mella importante en mi psique. Por el contrario, ni siquiera la presencia de vecinos o extraños me importó. No estuve nervioso al andar por la calle. Creo que he superado mis complejos de modo importante pero conservo la idea de que "me da miedo salir y ver gente". Hoy he comprobado que esa idea es falsa.

¿De dónde ha surgido esa inusual seguridad? Será que esta última semana me ha curtido.

Gracias, señorita "Y".

jueves, 26 de abril de 2012

Resolución.

"¡Oh amor poderoso! Que a veces hace de una bestia un hombre, y otras, de un hombre una bestia".

 William Shakespeare. 

  Miércoles, 25 de Abril, 2012.

[09:02 AM] Después de ese último mensaje que le envié, me siento más tranquilo y juraría que hasta contento. Creo que comienzo a asimilarlo. Pero ya tengo cierta noción sobre cómo se mueve la psique y seguro que experimentaré altibajos. De repente me impactará su recuerdo, o evocar el hecho que jamás la volveré a ver ni saber de ella. El romper un vínculo emocional genera estados que podrían considerarse psicóticos. Euforia y tristeza se alternan y sobrecargan el cerebro.

Con respecto al último mensaje que le envié, lo más probable es que no lo responda. Espero que sea así. O quizá lo haga, pero no de inmediato, a lo mejor decide dejar pasar unos días para hacerme escarmentar, que no lo creo ni albergo esa ilusión pues ya me he entregado a la idea de no volver a interactuar con ella. Suponiendo que lo responda, será en tono de regaño, y me haría sentir ridículo e idiota. Me haría sentir mi inmadurez, como una maestra regaña a un chiquillo. Pero no me responderá. No me engaño y noté su resolución de ignorarme completamente. Posiblemente quería que, por dignidad o vergüenza, tomara yo la iniciativa de cortar contacto definitivamente.

En lo que a mi respecta, esto ha concluido.

Jueves, 26 de Abril, 2012.

[04:14 AM] No esperaba que me respondiera. A veces parece conocerme más que yo mismo. Debe ser la experiencia; sabe de qué adolece el hombre.

Sucumbí al impulso de reanudar comunicación con ella y aceptó. Sus respuestas no dejan de ser indiferentes y una vez más me hace sentir como un idiota volátil y arrebatado.

Pero no volverá a ser lo mismo. De ahora en adelante seremos meros contactos. No amigos ni confidentes. Limitaremos nuestra interacción a saber que simplemente nos encontramos ahí, ocupando un lugar en el espacio. No conversaremos más o lo haremos muy rara vez.

En mi afán por liberarme de este malestar psicológico, he aprendido más sobre el amor en una semana que en toda mi vida.


miércoles, 25 de abril de 2012

Epílogo.

Hola chamaquita. No te molesto más. Solo necesito decirte algo, es breve:

Soy consciente de que hice mal aquella vez. Fui muy invasivo y grosero contigo. Traicioné tu confianza. No debí entrometerme y menos del modo en que lo hice. Cuando vi cómo coqueteabas con ese chico, se me removieron muchas cosas que yo creí conclusas hace tiempo. Fue una reacción muy negativa e inmadura de mi parte.

Además, eres una mujer independiente y libre de hacer lo que quieras.

Me disculpo contigo aunque sé que de nada sirve pues el daño está hecho. Sé que te fallé como amigo y decepcioné como persona. Decidí alejarme para no hacerte más daño y para que ya no tengas qué lidiar con la molestia de interactuar conmigo. No me creerás pero también estoy decepcionado de mi mismo.

Sin embargo, antes de eso ya te notaba distante. Era obvio que ya no querías saber nada de mi, pero yo no quería verlo. Me cayó el veinte cuando leí que le escribiste a tu amigo que estarías encantada de platicar con él. Entendí el mensaje. No me es fácil de aceptar pero es lo correcto: hay qué dejar a la gente en paz cuando la hemos defraudado o simplemente le resultamos ya, poco grata. Así que no te preocupes que no te molestaré más por ningún medio.

Bueno, te digo lo mismo que hace un año: sé feliz. Y recuerda que eres una mujer especial y una dama. Y esto último debe quedarles bien claro a los que pretendan algo contigo.

Aunque no lo creas siempre te voy a querer.

Pues eso, chamaquita. Un abrazote y hasta siempre. ;)


lunes, 23 de abril de 2012

Señorita "Y", sea feliz. :)

Escribo esto al vuelo y por entero desde el hemisferio derecho.

Creo que he sido demasiado redundante con la cuestión de la introversión y la soledad que genera. He experimentado desde una soledad tolerable a la más aguda. Sin embargo, esto no me ha impedido tener relaciones. No he tenido muchas, sólo tres en toda mi vida. Aprendí mucho de esas experiencias pero definitivamente la que más me marcó fue curiosamente la más efímera. Esa fue la que más ha conmovido mi mundo interno.

En este blog he escrito mucho sobre esa persona. Nunca menciono su nombre. Le llamo la "Señorita Y", no recuerdo por qué se me ocurrió comenzar a decirle así.

Nos conocimos por una amiga en común en Facebook. Fue curioso porque cuando yo accesé a su perfil y observé sus fotos, me pareció una chica físicamente agradable, pero no me causó una impresión profunda. Aparecía muy seria y calculé que era una persona de carácter áspero. Comenzamos a conversar y fuimos entablando un vínculo de amistad muy grato. Con el tiempo ella comenzó a darme a entender que yo le gustaba, lo que me sorprendió muchísimo. Mi reacción fue, por un lado, de alejamiento pero a la vez de dicha por saber que había alguien allá afuera que se interesaba en mi.

Llegó un momento en que conversábamos mucho por este medio. Ella me propuso que deberíamos vernos en persona, pero por los complejos que he mencionado antes siempre le puse pretextos y evadía sus invitaciones. En varias ocasiones ella me invitó a salir de paseo durante un fin de semana a cualquier lugar fuera de la ciudad. Sus invitaciones me generaban cierta presión pero también entusiasmo. Un entusiasmo que se vio coartado por mi timidez. Deseaba verla pero la timidez me lo impedía. Incluso llegué a pensar que se trataba de una broma o que no era ella la de las fotos. Precisamente los introvertidos somos aún más desconfiados que la gente normal.

Pero no resultó ser broma. Y sí era ella la de las fotos. Por fin nos conocimos en persona... y fue muy significativo para mi ese encuentro. A partir de ese encuentro, las cosas cambiaron. Casi desde que nos conocimos, ella dio visos de aprobación hacia mi, es decir, no solo como amistad sino para algo más... y yo no le correspondí. Pero después de conocernos físicamente, se invirtieron los roles. Ella comenzó a alejarse y fue cuando yo comencé a sentir un interés más profundo. Podría decirse que fue cuando realmente comencé a enamorarme; cuando mi cerebro comenzó a liberar dopaminas por ella.

Pero a su vez ella fue distanciándose. Ahora ella era quien se alejaba y yo quien la buscaba. Fue una etapa bien difícil que no he superado del todo. Esto ocurrió hace un año más o menos Durante varios meses pensaba en ella todo el tiempo y evocarla me alteraba emocionalmente. Pero decidí no importunarla más, darle su espacio e intentar aceptar que, bueno, ella ya no quería saber de mi. Pienso que su alejamiento se debió a mi carácter. No es que sea yo una persona conflictiva o negativa pero sí difícil de tratar por que no soy muy abierto. Esa barrera desanima a la gente o le hace pensar que yo no quiero tener relación con ella.

Poco a poco traté de asimilar su distanciamiento. En cierto punto creí haberlo superado... pero me equivoqué.

Estoy lidiando actualmente con un incidente que podrá ser una bobada visto desde una perspectiva amplia, pero a mi me pegó muchísimo y trajo al presente todo ese torrente de emociones que yo creí ya había superado. Y precisamente fue por un estímulo muy bobo pero que me impactó demasiado: ella sostenía una conversación con otro chico en Facebook, y en sus comentarios se dejaba entrever una atracción mutua. Manejaban mucho lenguaje figurado, de doble sentido, y él le daba a entender que quería tener relaciones sexuales con ella. En un momento dado ella subió una foto muy sugestiva, por decirlo así [con lencería, recostada en su cama, mostrando parcialmente sus "encantos"]. Después quedaron en verse y acordar el día por mensaje privado.

Esto me produjo una mezcla de emociones muy rara porque, por un lado lucía hermosa y me arrancó un hondo suspiro. Y por el otro me golpeó ver que el que ella haya subido esa foto; fue una forma de ofrecérsele a ese muchacho. No sé qué me pasó en ese momento. La mente es muy traicionera; encierra muchas cosas ocultas que ignoramos que están ahí, pero de repente surgen. Y al ver esta foto, no pude evitar comentarla. No mencionaré qué comentario fue pero, estuvo mal. No debí hacerlo pero fue algo impulsivo. En el fondo me sentí desplazado, rebasado. En previas conversaciones quedamos como amigos pero con este incidente conscienticé con toda su fuerza el hecho que yo ya había sido descartado, a pesar de que supuestamente ya lo había aceptado meses atrás.

Y es lo que enfrento actualmente. Ese desengaño, el saber que en realidad aún sigo pensando en ella y todavía estoy enamorado de ella. Pensaba que todos esos sentimientos ya se habían desvanecido, pero ese estímulo los sacó a la luz otra vez, los reveló otra vez.

Esto fue hace tres días, es reciente y sigo, como se dice comúnmente, "sacado de onda". Y me encuentro en esa etapa en que uno piensa obsesivamente en aquella persona. O el solo hecho de imaginarla con alguien más, eso ya produce una ansiedad y desesperación. Eso de algún modo sacude mucho la psique. Pero vamos, es algo que no se puede evitar, es decir, la gente no nos pertenece, tiene derecho a elegir, uno debe dejar que la gente haga lo que quiera. Si la gente se aleja, no debemos insistir. Hay qué respetar su voluntad. Y bueno, yo formé parte de su vida por un tiempo, muy efímero quizá, pero en el fondo no lo acepto todavía.

Actualmente "Y" se comporta muy cortante conmigo. Ella dice que tiene problemas, que no es personal. Pero yo siento que esa actitud es solo para conmigo y no con aquél chico u otras personas. Y eso me afecta mucho. Es como un corto circuito porque recuerdo todo lo que compartí con ella, cuando me buscaba, me prodigaba afecto, decía quererme... y de repente, ya no siente nada por mi. Ya no le resulto una compañía grata. Y he pasado de ser alguien especial a ser una molestia o solo un contacto más.

Y hay qué aceptarlo, pero es difícil. Yo solía burlarme de la gente que se enamora. La soledad me confería cierta arrogancia de sentirme libre de ataduras. Pero esta chica me demostró que, por un lado, aún tengo la capacidad de amar, de sentir afecto profundo. Y me desengañó, demostrándome que no soy tan independiente como pensé. Yo me tenía por una persona relativamente libre de la aprobación de los demás. Y resulta que no es así, dependo mucho de la aprobación de esta persona.

Ayer intercambiamos una serie de mensajes y me respondió muy cortante. No lo recibí muy bien y admito que por un momento casi me gana el llanto al leer la frialdad de sus mensajes; pero ella insiste que en no es personal, que se debe a problemas que tiene en general. Sin embargo, como mencioné anteriormente, con los demás no es así, con los demás es alegre, como siempre.

Creo que no volverá a ser lo mismo después de lo que hice (ese comentario tan fuera de lugar). Ni siquiera una disculpa es suficiente, el daño está hecho. No tuvo repercusión en su círculo social; sólo lo leyeron ella y su pretendiente pero con eso bastó. Ese pequeño comentario causó suficiente daño, y además le causó una decepción profunda, porque no esperaba que yo llegara a comentar eso. Pero es extraño porque se supone que habíamos quedado como amigos, luego entonces mis celos son infundados. Mi reacción tendría justificación si ella fuese mi novia, pero no lo es, es mi amiga... o era.

Apenas comienzo a valorar lo afortunado que fui al conocerla y al poder estar con ella. Como dice la frase, "nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido" y es cierto. A veces los seres humanos somos muy torpes, no valoramos a las personas cuando están con nosotros.

Tengo una fantasía recurrente. Cómo me gustaría viajar al pasado y corregir las cosas que no hice bien con ella. No me refiero solo a este incidente reciente sino a experiencias anteriores. Porque inicialmente yo sí la rechazaba mucho. Sin embargo, ella no dejaba de buscarme. Me hablaba por teléfono, me enviaba mensajes, me mandaba mails, me escribía por Messenger. Y yo era muy distante. Y a veces fantaseo con eso, en cómo me gustaría viajar un par de años atrás y ser para ella lo que ella esperaba. Corresponderle bien. Y quizá ahora estaríamos juntos. Pero es una fantasía solamente.

Podría parecer exagerado pero la señorita "Y" es como un milagro en mi vida porque me hizo romper esa coraza en la que yo me resguardaba. Me hizo romper con eso. Y en el tiempo que estuve con ella yo me sentía bien diferente; nunca me había sentido tan bien. Fue una experiencia bastante bella. Lo curioso es que cuando comenzó a alejarse, mi mente comenzó a invalidar mi experiencia con ella, es decir, le restó solidez, por decirlo de algún modo. No encuentro las palabras para explicarlo pero ante el dolor del rechazo mi mente prefirió interpretar nuestra relación como algo imaginario.

Pero vaya, a pesar de lo que ha pasado, de este último problema que generé, a pesar de todo, prevalece el amor que le tengo. Quizá si se lo dijera no me lo creería. Creo que las personas solitarias valoramos mucho más los vínculos emocionales porque no nos son tan comunes; lo poco que tenemos lo valoramos más. Y bueno, de nada serviría que le dijera que la quiero o estimo porque valen más los hechos que las palabras. Y yo nunca fui capaz de demostrárselo como ella hubiese querido. Así que finalmente no me queda mas que aceptar todo esto. Nunca lo aceptaré del todo. Pero siempre va a tener un lugar en mi corazón, siempre siempre. Y me considero afortunado por haberla conocido porque si no fuera por ella no habría descubierto lo mejor de mi. No habría roto con esa coraza. Que fue solo temporalmente porque después de que terminamos, volví a ser el mismo tipo cerrado. Pero al menos tuve la oportunidad de abrirme, una vez en mi vida, gracias a ella y vivir la experiencia de compenetrarme con alguien. Fue algo muy bello.

Ella nunca va a leer esto, pero sí le digo que es una persona muy importante y que merece ser feliz. No queda mas que desearle lo mejor. Ayer me dijo que se encuentra en medio de una crisis. Siento que lo ha inventado para alejarme y deje de molestarla. Pero asumiendo que es verdad, espero la supere pronto. La felicidad no debería serle ajena. Bueno, a nadie debería serle ajena, pero a la gente que más apreciamos es a la que le deseamos lo mejor. Y ella merece lo mejor.

Es todo.

sábado, 21 de abril de 2012

Resurgen los Demonios.

Y se han manifestado potentes.

Después de un año, vuelvo a solicitar ayuda en "Apoyo Psicológico Online". Redacté esta petición en sólo una hora. ¿La razón? Un estímulo ambiguo, positivo y negativo a la vez. Muy confuso y abrumador.

A Apoyo Psicológico Online:

Mi nombre es -----, tengo treinta y dos años. Tuve una relación fugaz hace un año, basada más que nada en lo físico. Concluyó pero quedó en mi psique un rastro de "aprensión" a aquella persona. El sólo hecho de pensar en ella me producía ansiedad y desesperación... una sensación se asfixia. Con el tiempo este padecimiento disminuyó y creí haberlo superado. Seguía en relativo contacto con ella y digamos que mi cerebro se conformó con eso.

Pero ayer que, mediante Facebook, la vi coqueteando con otro chico, me sentí desplazado. El colmo fue cuando ella subió una foto muy sugestiva; entonces sentí una contracción en las vísceras. Me impactó demasiado. Me hizo corto circuito el ver cómo prácticamente ella se le estaba ofreciendo a aquél muchacho. Toda esa ansiedad se desencadenó otra vez y consigo esa sensación sofocante. Me di cuenta que no he superado dicho estado. Solo permanecía latente, esperando el estímulo adecuado para ser reactivado. Me tomó por sorpresa.

Sé del papel fundamental de la química cerebral con respecto al "amor", que en realidad es solo un "feromonazo". He buscado información sobre cómo opera ese fenómeno en el cerebro, cómo se activa, etc. Obviamente mi documentación es muy pobre y no se compara con una investigación seria. Pero cuando este fenómeno me ocurre, al menos ya cuento con cierta munición intelectual para abordarlo. El problema es que a pesar de tener toda esta información y recurrir a ella cuando me pegan los celos o "el feromonazo" (ayer fue una mezcla de ambos: una extraña explosión de dopamina al verla en esa foto y al mismo tiempo la decepción de que se está ofreciendo a otro) no puedo superarlos.

Mi pregunta es, ¿cómo puedo disolver dicho estado cuando se presenta? Practico meditación y por un momento parece que lo estoy venciendo. Pero de repente, se presentan todas esas pantallas mentales y me golpean con todas las emociones que conllevan; incluso el solo imaginarla relacionarse con alguien más en el plano sexual o ser consciente de esa posibilidad, me produce este estado. Es muy molesto y pernicioso. No quiero sentirme así y no quiero volver a experimentarlo. ¿Cómo hago para deshacerme de él? ¿Por qué es tan fuerte, qué le da tanto poder? Quiero ser libre y no depender de ello ni volver a experimentarlo nunca. Es como un "quiste psicológico".

Les agradezco de antemano y gracias además, por todo el conocimiento que nos comparten.

Espero impaciente la respuesta.


Actualización, Martes 3 de Julio, 2012.

Pensé que nunca obtendría respuesta alguna. Nuevamente fui remitido a otro caso que quizá no sea muy similar al mío. La diferencia es que aquél chico imagina cosas que no son. Pero el consejo que le dan es bueno y me ha servido.

jueves, 19 de abril de 2012

Situaciones límite.

[Bajo la etiqueta "Archivo del Foro" rescato algunos textos y respuestas del foro en que participé ocasionalmente por un año y medio.]

Encierro total.

17 de Enero de 2011.


Estuve como tú. Tampoco salía de casa, no hablaba con nadie por días y pasaba mucha angustia ante la idea de salir, o incluso al recibir alguna visita, que se mostraba sorprendida de mi estado desaliñado, lo que me hacía sentir más hundido. Lo que hice fue obligarme a salir. Primero a darle vuelta a la cuadra, resistiendo esa angustia y examinándola al mismo tiempo. Al regresar a casa me daba cuenta de que el temor a salir o ser visto no residía en el hecho en sí, sino en mi propia inseguridad. Pero al día siguiente el temor se había re-implantado en mi mente, y de nuevo me obligaba a salir, recordando la noción a la que había llegado el día anterior. Así fui ganando terreno.

Todavía siento algo de temor a salir, pero éste ya no me frena ni me gobierna. No lo he vencido del todo, pero ya no me siento petrificado al salir o convivir con otras personas. Te recomiendo ese "ejercicio", lo importante es que antes de salir te relajes (así, como Spiderman). No te tenses ni adoptes una actitud defensiva, porque eso incrementa la angustia. Piensa que las personas que te llegues a encontrar no son mejores que tú, son sólo simples mortales.

Sé que se leerá obvio, también te sugiero acudir con un profesional. Y no hagas caso de lo que tu familia dice. Que tu objetivo sea salir adelante. Lo importante es que quieres cambiar tu situación. Así que la voluntad la tienes. Sólo te falta esa pequeña ayuda la cual, la mayoría de las veces no llega sola. Tienes que buscarla. Y también tienes este foro.

Primeras experiencias laborales.

16 de Enero, 2012.


Las primeras experiencias laborales no fueron muy gratas. Para empezar, mi búsqueda de empleo fue bastante penosa. El temor me obstaculizaba siempre. Me ponía nervioso de sólo pensar en tocar una puerta o entrar a un local y solicitar empleo. Simplemente no lo soportaba. Muchas veces el miedo a hablar con otras personas era tal, que pasaba de largo frente a los locales donde solicitaban gente. Así perdí varias oportunidades. También, era constantemente rechazado por no llevar algún documento (CURP, una carta de recomendación, etc).

Por cierto, en todo ese periodo jamás conté con ningún apoyo, ni moral ni económico. Llegó el momento en que, ya con poco dinero, debía meditar cada gasto y muchas veces debí recorrer largas distancias a pié a fin de ahorrar en pasajes y hacer rendir el dinero al máximo. También me quedé días sin comer. Es horrible irse a la cama con el estómago vacío, la angustia de la situación en general y el temor de enfrentarla al día siguiente.

Una vez encontré empleo lavando autos. Me contrataron sin necesidad de documentos. Estaba desesperado y lavé autos por una semana. Desistí debido que era extenuante y al temor de que algún vecino me reconociera, ya que el local quedaba relativamente cerca de mi casa.

Sí, era un sufrimiento absurdo (bien pude pedir ayuda), pero entonces mi fobia social se encontraba en su grado más intenso, lo que me impidió hacer cosas que de ordinario haría.

Poco después conseguí un modesto empleo en una pizzería como ayudante general. No me satisfizo (ahí sufrí un poco de bullying) pero al menos ya tenía una fuente de ingresos que me permitiría remontar un poco. Fue mi primer empleo formal por decirlo así, y tampoco duré mucho (tres meses). De hecho durante ese tiempo era bastante inestable y brincaba de un empleo a otro, con largos periodos de inactividad. Pero eso de algún modo me ayudó a ganar confianza.

Todo esto fue hace 10 años ya.

Actualmente mi vida laboral es... aceptable, por no decir mediocre. No gano tanto como quisiera, pero alcanza para pagar las cuentas y el sustento básico. Me he acostumbrado a los percances propios de cualquier entorno laboral: los conflictos, las habladurías, los abusos, pagos retrasados o incompletos, la posibilidad de un recorte de personal, etc. De cualquier modo, me encuentro mejor que antes. Esa época me desgastó demasiado y en realidad no aspiro a mucho.

¿Te sientes y estás solo día a día?

18 de Febrero de 2012.


Me siento aislado a pesar que de mi estructura de vida me obliga a convivir con otros. Pero es una convivencia superficial que no va más allá. De algún modo es como estar solo, pues jamás se comparte alguna inquietud personal. Es como introducirse a una obra de teatro cuya historia es prácticamente inalterable y en la cual no se puede incidir mucho. No es que la vida sea así. Lo es sólo para quien vive sometido por su apocamiento.

La mayor parte del tiempo estoy físicamente solo. Aunque tengo parientes jamás les hablo y ellos tampoco a mi. No voy a visitarlos, así como ellos tampoco vienen a visitarme. Amigos, pareja... ni pensarlo. Mi círculo social es limitado, por no decir inexistente. Mi compañía constante es un gato. Llevo una vida tranquila, sin emociones fuertes, pero solitaria.

Uno nunca se acostumbra totalmente. Siempre habrá la necesidad de un oído amigo que nos conceda un poco de comprensión o empatía y no juzgue. Yo sobrellevo esas carencias emocionales y períodos difíciles con un diario, meditación, lectura y ejercicio, básicamente. Antes la soledad me oprimía, la consideraba injusta. Ahora he aprendido a lidiar con ella.

¿Cuánto se puede soportar? No lo sé. Mi período de aislamiento más extenso (no salir a la calle, no hablar con casi nadie) duró poco más de un año. Experimenté una especie de "parálisis emocional" en la que no sentía nada, no me importaba nada. Las personas me parecían entes fantasmales, intangibles. Perdí contacto con la realidad y fue la necesidad económica lo que me obligó a reintegrarme a ella. Fue muy difícil porque ya no me sentía parte de este mundo. No sé qué habría pasado de seguir así. Quizá habría perdido la razón o me habría muerto de hambre.

miércoles, 18 de abril de 2012

Soledad: esa fiel compañera.

[Bajo la etiqueta "Archivo del Foro" rescato algunos textos y respuestas del foro en que participé ocasionalmente por un año y medio.]

¿Por qué no tienes novia?

16 de Noviembre de 2011.


Descubrí que no tengo ya la capacidad de relacionarme con alguien a profundidad (es el saldo de la soledad prolongada). Me llego a sentir invadido cuando alguien comienza a mostrar interés por mi y me pregunta sobre detalles personales para conocerme; qué me gusta, a qué me dedico, mis planes para el futuro, etc. Si ese tipo de indagaciones, que apenas serían el preámbulo de una posible relación, me hacen sentir incómodo, una relación formal me sería asfixiante.

Otro factor es el compararme desfavorablemente con otros. Siempre me he considerado inferior, o un pobre prospecto que no tiene nada bueno qué ofrecer a nadie. Así que cuando alguna mujer me da a entender que le atraigo, me parece incomprensible, fuera de lugar. Hace algunos meses me di la oportunidad de involucrarme con alguien y las cosas no resultaron muy bien debido a mis complejos e intratable modo de ser. De todos modos, a mi edad esta cuestión ya no debería preocuparme mucho, así que procuro enfocarme en otras cosas.

Obsesión de los foreros con el sexo.

20 de Diciembre de 2011.


No creo que sea obsesión. Muchos de los usuarios en el foro son jóvenes, y es comprensible su interés por el tema. Forma parte de las múltiples experiencias que debe tener un ser humano, y resulta anti-natural que un joven se vea privado de ella. En cualquier caso genera frustración el no poder participar de dicha experiencia, pero tratándose de un joven tímido, inseguro o introvertido, la frustración es mayor al ver que una experiencia tan común para la mayoría le parezca (que no lo es) inaccesible.

Ahora, fisiológicamente es una necesidad. En lo personal, dudo mucho que exista alguien capaz de suprimirla o "aguantar". Nuevamente, intentar reprimir esta necesidad genera frustración, y reitero, es anti-natural que un joven deba reprimirse en este aspecto. Uno bien podría proponer "ah, entonces, si es tanta su necesidad, vayan con alguna prostituta". Pero un joven no quiere eso en verdad. Lo que busca es la vivencia completa, que es conocer a una persona, entablar amistad con ella, encontrar cosas en común, vivir el enamoramiento y finalmente la experiencia sexual. Porque ésta no solo aporta satisfacción física, también es fuente de bienestar emocional.

¿Tienes a alguien que te pregunte "cómo estás"?

25 de Diciembre, 2011.


En México se acostumbra preguntar eso a modo de saludo, no por un interés genuino (la mayoría de las veces). La gente no espera que le confieses algún problema; tan solo un breve pero interesante resumen de tu vida para tener en qué pensar durante el día. En consecuencia, uno aprende a callar sus problemas y guardarlos para sí.

Pero tengo dos amigas con quienes puedo hablar abiertamente y realmente se preocupan por mi. A estas alturas me conocen demasiado bien, y ya no puedo ocultarles casi nada. Se dan cuenta cuando me encuentro "en horas bajas" y son un verdadero oído amigo, así como (quiero pensar) yo lo soy para ellas.

No pretendo discriminar, pero me atrevo a decir que las mujeres tienen más sensibilidad y tacto en estos asuntos. Me siento más a gusto platicando con aquellas dos amigas y definitivamente estoy en deuda porque en un principio puse demasiadas barreras. Cualquier otra persona hubiese desistido, pero ellas no lo hicieron, y por ello me considero afortunado.

¿Alguna vez has besado a una chica?

18 de Febrero de 2012.


Sólo dos veces. La primera vez tenía yo 12 años y ella 15. Esa chica tenía bastante experiencia para su edad y de hecho tenía cierta fama de... bueno, el caso es que era de esas chicas que tenía un novio por semana. De repente comenzó a acosarme sistemáticamente. Me iba a buscar a mi casa con el pretexto de "salir a jugar" o acompañarla a la tienda; entonces me abrazaba, besaba y prodigaba demasiado afecto lo cual no pasó desapercibido por mis padres que desconfiaban de ella y me advirtieron que no le permitiera esas actitudes conmigo. En cambio, sus padres jamás se mostraron preocupados; creo que conocían bien a su hija y habrían desistido hacía tiempo de inculcarle control sobre sus impulsos.

Pues varias veces, en algún lugar del patio, o en la azotea, ella me arrinconaba para descaradas sesiones de besos ante los cuales yo no sabía cómo reaccionar. Me sentía invadido, y recuerdo su paciencia al enseñarme lo que sabía pero, ¿qué esperaba de un niño de doce años? Bien, fui su peor alumno porque, cohibido ante mis encuentros con ella, no me desenvolví como hubiese esperado. Sé que las generaciones actuales ya dominan estas cosas a los doce o trece años, pero en mis tiempos (hace ya veinte años) era diferente.

La segunda vez fue hace un año, con una chica de treinta y siete. Fue algo inesperado, no sabía que eso iba o podría suceder. Esta vez temía que notara mi prácticamente nula experiencia, pero fueron besos breves. Ella fue más cariñosa (en contraste con mi noviecita de hace veinte años que era, como se dice en México, "bien avorazada") y quiero pensar que no lo hice tan mal. Sí, estaba sumamente nervioso, pero ya estando ahí simplemente me dejé llevar y a pesar de mis nervios lo disfruté. ¿Cómo me sentí después de esa experiencia? Bueno, Superman era un pobre gusano a mi lado. Pasada una semana volví a mi estado normal y ahora recuerdo aquello vagamente. No dejó una huella profunda en mi psique, pero esto se debe a la coraza que genera el aislamiento: filtra las experiencias y las invalida parcialmente.


¿Has encontrado a alguien con quien puedas mostrarte tal como eres?

18 de Febrero de 2012.


Infortunadamente no. Existen ciertas personas con las cuales soy un poco más abierto, pero jamás me he permitido fluir del todo. Mi introversión me resulta aplastante sobre todo en esos momentos en que el contexto me exige más apertura y receptividad. Me toma tiempo romper con eso y solo se da con algunas personas a las que tengo qué sentir que conozco bien o considere confiables. Pero no existe nadie con quien sea yo realmente... de hecho, no recuerdo cómo es eso o cómo se siente ser así, libre de esa agobiante actitud defensiva.

martes, 17 de abril de 2012

Rutina provisional.

Para impedir el deterioro físico lo más posible, me estoy enfocando en ejercicios compuestos. Con la rutina que he diseñado no desarrollaré masa muscular pero me mantendré fuerte hasta que mis circunstancias mejoren. Cada hora realizo una rutina como esta:

  • Abdominales / 50 reps.
  • Lagartijas / 10 reps.
  • Peso muerto / 10 reps.
  • Remo con mancuernas / 10 reps.
  • Sentadillas / 10 reps.
  • Dominada en barra / 3 reps.

Por lo general la realizo tres veces al día. A veces cuatro pero no más de cinco. Es lo más que puedo hacer actualmente debido a mi astenia producto de una dieta insuficiente. Subí a Facebook un par de fotos en mi actual estado y ¡oh, ironía! los comentarios han sido positivos.

Les respondí honestamente: en persona me veo más delgado.

"Wounded Warrior", de Arno Breker.

Un mundo hostil.

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Cómo nos afecta la gente agresiva/altanera.

8 de Enero de 2011.


Pues depende de la seguridad que uno tenga en sí mismo, o de la importancia que se le den a esos incidentes. Hay gente que ensaya su "poder" haciendo esas pequeñas cosas en busca de un sentimiento de superioridad. Además la compañía y el alcohol inflan el valor. Tal vez esa persona estaba alcoholizada. Y a fin de cuentas lo que una persona bebida diga no tiene mucha validez. En otro contexto (por ejemplo, en la ciudad de México) ese par no habría tenido tanta suerte. Pero quizá llegue el momento en que se encuentren con alguien que les responda de forma distinta y entonces no actuarán igual.

En todos lados hay gente que se cree muy lista, muy habladora. Pero cuando uno comprende que todos esos comentarios provienen de la ignorancia pierden todo el valor que puedan tener. Es mejor pasar de esa gente; ignorarlos los coloca frente a su propia insignificancia, de la que huyen alardeando en la calle.

Nuevos y conflictivos vecinos.

27 de Agosto de 2011.


Te comprendo, mis vecinos son iguales. Estás tratando con gente que no respeta las normas básicas de convivencia. Este tipo de gente llega a intimidar porque parece capaz de todo. Les antecede una actitud desafiante y agresiva pero muchas veces no es mas que una máscara que usan para ocultar su inseguridad. También lo hace para imponerse en su nuevo entorno y medir la tolerancia de los demás vecinos (pero dices que le bajó a sus fiestas debido a las quejas. Bien, si realmente fuera tan desafiante no habría cedido).

La inseguridad nos coloca en desventaja con esta clase de gente. No te conozco, pero por lo que mencionas puede ser que tu actitud tienda a ser sumisa. Si ella detecta esa actitud, comenzará gradualmente a ensayar su poder contigo, escalando en su nivel de abuso. El problema realmente no son los vecinos conflictivos sino la inseguridad que revelamos ante ellos. Lo único que atino a sugerirte es que trabajes esos ataques de pánico y vayas labrando poco a poco tu seguridad interior. Apóyate en tu familia, busca ayuda. Sé que no es fácil (yo suelo experimentar recaídas, altibajos), pero es que no tenemos mejor opción que intentar superar el problema.

También sirve fingir un poco. Por ejemplo, las hostilidades de mis vecinos serían mayores de no ser por mi mala facha. Yo creo que se vale actuar un poco en lo que desarrollamos un verdadero aplomo. No te permitas ser afable ante ella, sino lo más adusta que puedas. Bertrand Russell dice que "un perro ladra más ruidosamente y muerde más pronto a los que le tienen miedo que a los que lo tratan con desprecio... si le demostramos miedo ve la posibilidad de una buena caza, mientras que si somos indiferentes, dudan de su poder y tienden a dejarnos solos".

También es oportuno dimensionar las cosas. Si llega la vecina a tocar a tu puerta, con su actitud gritona y altanera... no pasa nada. Este tipo de gente rara vez llega a los golpes. Pero ante algún viso de agresividad física, puedes llamar a la policía y verás si no modera su comportamiento.

¿Cómo respondes a los insultos y provocaciones?

15 de Noviembre de 2011.


Lo primero que hago es ignorar al provocador, pero a la vez me pongo a la defensiva (la mejor reacción que puedes tener es de indiferencia u hosquedad; jamás de miedo). También depende del tipo de provocación. Si es verbal, lo mejor es no darle importancia porque a fin de cuentas ese tipo de ofensas son inocuas, y quien las emite sólo está tratando de superar algún complejo. Quien se siente fuerte, no ofende.

Si es física (un empujón, por ejemplo), puedes advertirle que no vuelva a hacerlo. Pero también deberás predisponerte para un enfrentamiento físico, porque generalmente no entienden con palabras; una vez que se ha pasado de lo verbal a lo físico, el diálogo no sirve de mucho. Su intención es ponerte a prueba para ver cómo respondes. Si del empujón pasa a los golpes, hay tres opciones: defenderse, huir o dejarse golpear.

Obviamente, lo ideal es defenderse, pero no es tan fácil si se es tímido o temeroso. La violencia siempre sorprende y muchas veces nos paraliza. Tardamos en asimilar que estamos siendo agredidos y no sabemos cómo responder. Lo que nos lleva lo que se ha recomendado mil veces en el foro: hay que desarrollar confianza en nosotros mismos, para que no nos traicione nuestro propio temor cuando debemos actuar. Y ¿por qué no? Aprender algún tipo de sistema de auto-defensa para sentirnos fuertes y saber responder cuando llegue el momento. Este mundo está lejos de ser civilizado, y tarde o temprano seremos víctimas de alguna agresión. Más vale estar preparados.

Sufrimiento tras la muerte de una mascota.

19 de Noviembre de 2011.


Tuve una mascota a la que quise mucho. Me hizo compañía por más de diez años, demasiado tiempo tratándose de un gato. Cuando murió, sufrí una especie de desconexión emocional. Aprendí que no debía estrecharme tanto a ningún ser vivo para no sufrir su pérdida, pero pasa que entre más escasos son mis vínculos emocionales más me aferro a ellos.

Podrá leerse tonto, pero si uno se encariña tanto con una mascota es porque, con todas nuestras deficiencias como seres humanos, no nos juzga y su compañía si bien no es desinteresada (su apego a uno es por supervivencia) es honesta. Jamás nos traiciona, engaña o abandona.


lunes, 16 de abril de 2012

Uno contra el mundo.

[Bajo la etiqueta "Archivo del Foro" rescato algunos textos y respuestas del foro en que participé ocasionalmente por un año y medio.]

Ver la calle antes de salir para evitar a los vecinos.

17 de Abril, 2011.


Lo hacía antes pero me dí cuenta que esa práctica sólo incrementaba la importancia que le daba a la opinión de la gente, aumentando mi nerviosismo. Ahora no lo hago porque me di cuenta que, después de todo, quienes pudieran juzgarme no son mejores que yo y simplemente soy uno de tantos por ahí. Además, a la gente nunca se le da gusto. Siempre hablará mal de uno, no importa que nuestro comportamiento sea intachable o nuestro aspecto el más pulcro. La gente tiende a enfocarse en los defectos ajenos, y si no los halla se los inventa. ¿Por qué darle importancia entonces?

¿Asistir a una comida?

20 de Abril, 2011.


Depende. ¿De qué sirve que vayas si te la pasarás mal? Si vas a estar tenso e incómodo durante toda la reunión, no tiene mucho sentido que vayas.

Por otro lado, vendría bien que analizaras, ¿qué te molesta de esas reuniones? Quizá haya algo por lo cual te desagradan, además de la convivencia que ya te es extraña. ¿Serán las preguntas que podrían hacerte y crees que no podrás contestar? ¿Temor a no desenvolverte bien y que los demás lo noten? ¿La atención que te pondrán cuando llegues y tener que saludar uno por uno a los presentes? En fin, estoy especulando solamente. Pero pienso que debe haber algún factor que te incomoda y hace que rehuyas a esa cita.

Te diré que las reuniones en general no tienen mucha ciencia. Llegas, saludas, y respondes educadamente a las preguntas. Si hay alcohol no estás obligado a tomar, y tampoco es un crimen si no fumas. Si te invitan (forzadamente) a bailar o algo así, no pasa nada si dices que no, y tampoco pasa nada si aceptas y lo haces torpemente. Relájate y no te presiones.

¿Sabes qué pasa cuando cometes un error? No pasa nada. Es solo una reunión. No vas al matadero, aunque uno lo llegue a sentir así. Como te dijeron más arriba, no pierdes nada con intentarlo. Te ayudaría a verificar si esas reuniones son en verdad tan malas o solo las concibes así.

¿Es posible tener pareja si se padece fobia social?

28 de Junio de 2011.


Pienso que si, pero sólo parcial o temporalmente.

Si la pareja sabe que tienes Fobia Social, estará prevenida y dispuesta a intentarlo. Si quieres tener pareja tienes que tratar de asumir otro rol, aunque por dentro lidies con la presión de someterte a actividades que te son extrañas. Esto es lo triste: que como socio-fóbico te es dolorosa una experiencia que debería ser grata.

Puede ser que el entusiasmo de estar en una relación te haga cambiar, o puede que tus complejos se hagan sentir con más fuerza. Si ocurre esto último, lo más probable es que con el tiempo la pareja en cuestión se vaya cansando hasta que decida concluir la relación.

Ahora, así como sube la autoestima al tener pareja, se desvanece cuando dejamos de tenerla. Y uno se siente peor, e incluso reniega de la experiencia: estaba mejor solo. Es decir, uno confirma esas ideas negativas sobre sí mismo.

¿Se puede tener pareja si tienes Fobia Social? Sí, se puede, pero no durará mucho y quizá te deje una sensación de vacío. Es mi triste conclusión personal. Pero a fin de cuentas es experiencia y se aprende de ella.

Virgen a los 32 años.

25 de Agosto de 2011.
*

*[He tenido solo una relación sexual en mi vida, pero cuando escribí estas líneas me encontraba en un estado en que negaba dicha experiencia.]

Como suele aconsejar la mayoría, es fácil dejar de ser virgen: sólo hay que pagar por ello. No juzgo a quien lo haga (a mi me pasó por la mente hacerlo) pero eso atenta contra la propia dignidad, creo yo. Lo que pesa es que en 32 años nos sea inaccesible algo que la mayoría ya ha experimentado sin complicaciones. A veces es inevitable auto-compadecerse.

Pero no es sólo la cuestión sexual. Uno lamenta mucho haberse perdido de todos esos momentos quizá cursis, pero propios del enamoramiento. Verse privado tal experiencia lo hace a uno sentirse marginado. Entonces uno emplea razonamientos como que "una relación es sólo egoísmo y pérdida de tiempo". Yo intentaba convencerme que no ha sido del todo malo ya que, libre de las dichas y sinsabores de una relación, he podido dedicarme a mi mismo (lo cual, tengo que admitir, no me ha servido de mucho).

Ahora sé que sólo trataba de engañarme cultivando mi individualidad. En el fondo me sigue importando el no haber tenido una relación a mis 32 años. Pero soy socio-fóbico y como tal me debato entre la frustración y el anhelo. Y temo que, si acaso se me presenta la oportunidad de relacionarme con alguien, estaré tan brutalizado por la soledad, que la experiencia me parecerá plana y vacía.

La única "ventaja" es que uno puede decir abiertamente "soy virgen a los 32" y no se nos juzgará. No lo creerán y pensarán que es broma.

domingo, 15 de abril de 2012

La vida y sus reveses.

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02 de Febrero de 2011.

Por lo que cuentas está complicado, pero en realidad es difícil saberlo y no queda mas que especular un poco. ¿Es realmente la situación tan mala o tú la percibes así? ¿Hay mucho bully ahí? Si estás rodeado de bullies (cuya única finalidad es fastidiar a quien pueden) entonces sí la tienes difícil y aceptémoslo: con ellos se requiere más que palabras. Pero si no es el caso entonces no te preocupes innecesariamente. El punto es que tienes que ponerte a razonar sobre qué aspectos te molestan y por qué, y de ahí pensar en cómo irlos resolviendo; habrá unos que puedas resolver y otros que estén completamente fuera de tu control.

Por ejemplo, es normal que los compañeros se vayan deshinibiendo conforme pasan los días. Es algo que no puedes controlar así qué, ¿por qué preocuparte por eso? Quizá te preocupa que en algún momento lleguen a meterse contigo jugándote una broma (los callados llaman la atención en un entorno de gente sociable y no faltará alguno que quiera obtener alguna reacción tuya) y que no sepas cómo responder si eso ocurre. Habrá que esperar a que suceda y entonces debes detectar si fue una broma inocente (para fomentar el compañerismo y romper el hielo) o con toda la intención de fastidiarte. Supongamos que lo hacen para fastidiarte. Esa primer reacción tuya será determinante. Si permites el abuso, verán que eres de esos que reciben sumisamente los agravios y entonces no te los quitarás de encima. Puedes ir con tu Director o maestro y tal vez su intervención resulte efectiva o por el contrario, te genere represalias. O puedes devolver el golpe y dejarles claro que eres de los que responden, pero también podrías entrar en un juego de toma y daca y hay que tener bastante paciencia para sobrellevarlo. Cada opción tiene sus bemoles.

Tal vez ya has leído lo siguiente en alguna clase de Filosofía, pero viene ad hoc con lo que estás viviendo:
"Mi tercera máxima fue procurar siempre vencerme a mí mismo antes que a la fortuna, y alterar mis deseos antes que el orden del mundo, y generalmente acostumbrarme a creer que nada hay que esté enteramente en nuestro poder sino nuestros propios pensamientos; de suerte que después de haber obrado lo mejor que hemos podido, en lo tocante a las cosas exteriores, todo lo que falla en el éxito es para nosotros absolutamente imposible". René Descartes.

Mira, si las cosas no resultaron como esperabas, no te desgastes. De entrada no eres responsable de ello porque no está bajo tu control; es algo que inevitablemente te rebasa. Lo que te queda es adaptarte, pero no en el sentido de rendirte apáticamente al entorno y dejarte llevar por lo que sucede en él, sino aceptar que ahora la jugada es distinta y debes irte ajustando a esos cambios según sea necesario. Es decir, tienes que ser un tanto estoico: que la vida te juegue chueco no necesariamente implica que deba afectarte. Pero tampoco asumas una actitud pasiva. Usa esas dificultades como "práctica".

Espero que todo resulte bien.

sábado, 14 de abril de 2012

Respuestas del Foro.

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¿Les gusta la fiesta?

16 de Enero de 2011.

Ahora no me gustan ni me interesan pero debo admitir que me habría gustado ser más "fiestero". Me perdí de todas esas experiencias que para los demás son parte de su vida. Mientras la gente de mi edad se la pasaba bien yo estaba en casa leyendo o dibujando (de todos modos me la habría pasado mal).

Hoy en día tolero estar en ese tipo de ambientes o eventos, pero sólo una hora o dos. No más. Después de eso comienzo a sentirme más tenso y termino por irme. Pero ya no me preocupa tanto el desenvolverme bien o que los demás noten mi actitud antisocial. Ya no hay tanta presión en ese sentido, y los que me conocen ya han desistido en sus intentos por hacer que me integre. Cuando tengo que asistir a algún evento social me voy a un rincón y desde ahí observo todo, intentando pasar desapercibido.

Pérdida de sentido.

17 de Enero de 2011.


Puede ser que estés atravesando por eso que llaman crisis existencial, que es cuando experimentas aburrimiento, hastío, o una falta de sentido en general. Es decir, las cosas a tu alrededor están perdiendo valor para ti. Quizá comienzas a verlas vanas o poco importantes. Pero es una etapa en la que tienes que revalorar tu vida en general. Es oportuno que te preguntes ¿para qué estoy aquí? ¿por qué hago esto o aquello, qué finalidad tiene? Preguntas en apariencia simples, pero créeme, son desafiantes.

Tienes todo el derecho a cuestionar significado de las cosas y puedes darle la espalda al mundo por un tiempo, pero no te abandones. Aprovecha este periodo a tu favor. Puedes leer, puedes escribir, ponte a hacer ejercicio. Dale un valor constructivo a la experiencia, saca algo bueno de ella. Pero no te encierres en ti mismo, apóyate también con un terapeuta o un psicólogo. Estas etapas tienen su lado bueno y su lado malo. El bueno es que puedes aprender mucho de ti mismo y convertirte en una persona mejor. El malo sería caer en una espiral descendente, en la que cada vez te sientas peor, cada vez más vacío, deprimido, al grado permanecer completamente inactivo. No tiene por qué ser así. Todo depende de tí. Tienes poder de elección.

viernes, 13 de abril de 2012

Cómo iniciar un acercamiento.

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5 de Enero de 2011.

No hay más que intentarlo. Los primeros acercamientos uno luce un poco torpe (lógico, por la timidez y la inexperiencia). Lo sé porque he pasado por lo mismo que tú e igualmente paso de los 30. Me armé de valor y me acerqué a una chica; intenté hacerle plática pero las cosas no resultaron muy bien. Creo que no fue el momento adecuado para abordarla. Sin embargo queda la satisfacción de haberlo intentado... y el placer de adrenalina al estar frente a esa chica inaccesible y charlar (aunque torpemente) con ella.

Lo que pasa es que uno llega siempre con un montón de consideraciones: me voy a ver mal, se dará cuenta que no platico mucho con mujeres, me quedaré sin plática, no soy nada en comparación con otros que ella ha conocido, etc. Eso es lo que te boicotea. El sólo hecho de pensar en acercarte a ella ya te pone tenso, porque vas armado con todos esos complejos. Esto es como hablar en público. Al principio es difícil pero ya estando ahí comienzas a fluir, es algo que se da por sí solo. También depende del humor o actitud de la chica. Por ejemplo, si ella es reservada o soberbia, pues va ser difícil, independientemente de si eres tímido o no. Si la chica suele ser buena conversadora todo será muy fácil. Así que no todo depende de ti. Debe haber ciertas circunstancias que te favorezcan. No quieras controlar la situación, relájate y deja que las cosas se vayan dando.

Por cierto, todos esos consejos en páginas web te sirven sólo en cierta medida, porque se enfocan en "técnicas" y "estrategias" para ser un "aven", pero no dicen nada sobre cómo lo vive internamente un tímido. Sólo uno sabe cómo se sufre en esos momentos. Lo que tienes que hacer primero es superar esos complejos porque son los que te frenan.

Razona sobre qué es lo peor que podría pasar. Vamos a suponer que la chica en cuestión te ignora o te batea (como me pasó a mí, ja!). Pues te despides, te das la vuelta y te vas. Quizá hará comentarios con sus amigas a tus espaldas. Se burlarán un poco de tí... ¿y qué con eso? No ha pasado nada grave.

Inténtalo, no tienes nada qué perder. Además, esa frustración carcome por dentro. Te lo digo yo, que la padecí durante 1 año entero.

jueves, 12 de abril de 2012

Archivo del Foro.

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Sobre el bullying y el miedo.

26 de Diciembre de 2010.

Me permitiré expresar mi opinión, espero sirva de algo.

Yo sugeriría que trabajaras esos miedos. Como yo lo veo, tu inseguridad es el centro del problema, no tanto el bully aquél. Es cuestión de actitud (¿has visto la película Pánico a las 3?). Tienes que terminar con ese sentimiento de vulnerabilidad.

Sugiero que te vayas preparando. Por ejemplo, métete a un gimnasio, comienza a levantar pesas, pero con disciplina, no lo dejes al segundo día, sé constante. Métete a clases de karate o entrenamiento de box. No se trata de que te vuelvas violento, sino que seas capaz de defenderte por si tienes que hacerlo. Por lo general los bullies sólo se meten con quien pueden, con los que no ofrecen resistencia; tontos no son. Por eso tienes que cambiar primero. Imagina que logras ligar a aquella chica. No te vas a sentir a gusto sabiendo que en cualquier momento se va a aparecer el loco ese y tratará de meterse contigo haciéndote quedar mal frente a ella. No le des esa oportunidad. En un libro que estoy leyendo ("Cómo defenderse de los ataques verbales") viene este párrafo:

"Si se rebaja, invitará a los demás a que lo pisen. Si aparenta ser una ovejita, atraerá a los lobos feroces. Los agresores prefieren enfrentarse a personas que ignoran el poder que poseen. La gente agresiva no suele buscar pelea, sino que quiere vencer sin involucrarse personalmente. Para eso busca una víctima fácil. Los agresores experimentados detectan enseguida a la víctima adecuada que les asegurará la victoria. El agresor reacciona de forma inconsciente a ciertas señales emitidas por la víctima... quien camina de manera encorvada, encogida y doblegada, delata su propensión a ser víctima. El posible agresor sabe que esta persona le ofrecerá poca resistencia. El vacío de poder atrae a los agresores, por lo que vale la pena estar muy atentos a la emisión de dichas señales".

Obviamente siempre habrá personas más fuertes que otras, pero aquí no se trata de medirse con nadie, sino de darse a respetar cuando sea necesario.

Reitero, más importante que la fortaleza física está la interior. De nada te servirá la fuerza física si te vas a quedar paralizado por el miedo cuando te topes con ese tipo (si es que te lo encuentras, porque según lo que cuentas, no es del todo seguro). Trata de relajarte, no te estreses tanto. Quizá el próximo año te vaya inesperadamente mejor.

Sobre cómo ligar a la chica, me declaro incompetente para aconsejar algo, pero pienso que, como consecuencia de tu seguridad, acercarte a ella y hacerle plática será más fácil.

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